Hoy desayuné el primer menú del cartél.



Me quedé intrigrada al ver el huevo crudo. Tuve que preguntarle entre inglés y por gestos cómo se comía eso. Me comentó que había que mezclar salsa de soja con el huevo, batirlo y ponerlo sobre el arroz. El truco está en poner mucha salsa de soja para que no sepa a huevo. Por cierto, el sobre contiene pequeñas láminas de alga. Se puede mojar en salsa de soja o no, se coloca sobre el arroz y a aprieta con los datos con los palillos y se forma un pequeño rollo. Con este plato se puede pedir, el pescado, o un bol con arroz caldoso o なっと(natto).


Acabo de encontrar esta web sobre las guaguas (autobuses) de Kyoto con información muy útil. La mayoría de los extranjeros no entendemos el uso de las máquinas que tienen dentro. Por ejemplo, la máquina para hacer cambio y está web resuelve esas dudas aquí


Pues hoy estuve en el área de Okazaki. Visté todos los lugares que aparecían en el mapa. Los templos Nyakuoji Shirne, Eikando Temple, Nanzenji Temple y Chionin Temple. Son lugares preciosos y ahora viendo las fotos estos lugares en las otras estaciones del año, son aun más increibles.



En medio, mientras iba a visitar otro lugar me compré mi primer helado en Japón. Lo compré en una máquina y estaba muy bueno. Era helado dentro de un barquillo. Cómo decimos en mi tierra "hacía un sol que rajaba las piedras", o sea, que hacía mucho calor y en esos casos un helado sienta muy bien.



Y también vi esta curiosa clínica dental con parking para bicicletas.



Para almozar me fui a Gion a un restaurante que me había recomendado el recepcionista del hotel para comer "どんぶり" (Donburi), que consiste en anguila japonesa ("うなぎ" unagi)a la plancha sobre arroz, servido en un bol. El resturante tenía vistas al río. De camino, curzando el puente que hay en Gion, vi a un monje budista pidiendo dinero y rezando oraciones. Había leido sobre estos monjes, que piden dinero o comida y viven de eso.



Sinceramente en este sitio no me gustó mucho. Aparte de que me había dejado un pequeño cuenco con unos polvos verdes. Al ponerlos sobre la anguila con arroz se me quedó y comerlo, se me quedó la lengua insensible. Ahora que lo pienso, no estoy muy segura de si los polvos eran para la comida.


Después de comer me fui a visitar el Kenninji Temple. Es un poco ruidoso, ya que hay una sala en la que la gente se sienta para hablar, o descansar, pero en cambio, hay otras partes en las que se puede uno sentar al borde del suelo y contemplar el jardín zen.



Mi cámara no me permitó sacar una foto mejor, pero la verdad es que es un rincón que me gustó mucho



Se puede pasear por el jardín. Para ello hay unas zapatillas para pasear por el jardín justo al lado de las escaleras que dan al jardín.



Después estuve paseando por un parque donde encontré este curioso coche que parece que no lo habían movido en mucho tiempo



Cuando se puso a llover, decidí volver al hotel. Por el camino, me compré algo para cenar. Aquí va una foto de mi cena. Me compré uno de cada. La pena fue que cuando llegué al hotel ya estaban fríos. Todos eran bolitas de pulpo.



Y por hoy me despido con esta bonita foto. La verdad es que no conseguí ver ninguna Maiko por la calle.


Hoy me levante temprano para ir a la lavandería para poner la lavadora. La primera vez que usaba una lavadora con monedas. Allí conocí a una señora americana que estaba poniendo la lavadora. Resulta que era su último día en Kyoto y quería lavar la ropa de la familia antes de irse. Mientras esperabamos que las lavadoras terminaran pues nos pusimos a hablar. Me comentó unos sitios interesantes por la zona que podía visitar. Hablando y hablando, resultó que ellos se iban a hospedar en el mismo hotel que en el que me hospedé en Nara, asi que le comenté como tenía que llegar. Era una mujer muy simpática.
Después de lavar, volví al hotel para dejar la ropa y me fui a buscar un sitio para desayunar. Caminando por la ごじょ どり(Calle Gojo) estuve a punto de meterme en un Mc Donald pero tuve suerte de que al lado había un local de desayunos japoneses, asi que me metí alli. La camarera cuando me trajo el desayuno me indicó donde podía servirme más arroz. Por lo visto se podía llenar el bol con arroz cuantas veces se quisiera. Me pedí el último menú de abajo.



Hacía muchisimo calor en Kyoto y muchísima humedad. Me daba mucha pereza hacer cualquier cosa. Qué útil fue el pai-pai que me regalaron en Yokohama. Después de desayunar, volví al hotel a mirar un poco internet lo que podía mirar, pero internet no funcionaba. Le pregunté al recepcionista qué comida era famosa en Kyoto y me recomendó un sitio de とうふ (Tofu). Luego cogí la guagua(autobus) para ir a visitar el Templo Kinkaku-ji(Pavellon Dorado). Se tarda casi como 45 minutos a una hora en llegar. Antes de comprar la entrada, vi a una mujer tocando una campana gigante que había alli. Resultó que por una donación, otras personas también pueden hacerla sonar. Aqui va una foto que me gusta mucho.



Había muchisima gente pero tuve la suerte de poder sacar esta foto.



Al salir de allí, me fui al sitio de とうふ(Tofu) a almorzar. Tengo que reconocer que el recepcionista fue muy exacto al señalarme el sitio en el mapa. Me confundí un poco, ya que había como una especie de cafertería donde servían platos de とうふ(Tofu) y una tienda que vendía とうふ(Tofu). No me gustó mucho lo que me pedí, aparte de que estaba demasiado caliente para el tiempo hacía. A pesar de que tenían puesto el aire acondicionado, ni se me enfriaba la comida, ni yo dejaba de sudar.
Después me fui a la estación de Kyoto, a la oficina de turismo. Allí me compré dos pases de guagua (autobus) para un día entero. Después fui a la oficina de turismo de la perfectura para pedir información sobre otros lugares que podía visitar. Pensaba que cómo iba a estar varios días, me daría tiempo de ir a visitar otros sitios.
Luego volvía al hotel, pero antes pasí por un combini y me compré unos aperitivos son sabor a たこやき(bolitas rellenas de pulpo) y un helado, que no era helado. Ya se que lo último suena raro, pero vean y juzguen.





Ese día volví temprano ya que estaba cansadísima y no me apetecía salir dar una vuelta.

Hoy me levanté temprano para ir a ver el caminando hasta el Tori antes del desayuno. Fui con el yukata del ryokan y las cholas (chanclas) que me comentó la mujer anoche cuando le pregunté cuales me podía poner para salir a dar un paseo. No pensé que fuera a haber tanta gente.Jejejeje todos tuvimos la misma idea, pero yo fui la unica masoquista a la que se le ocurrio la brillante idea de andar por la playa descalza. Estaba llena de piedritas y pequeñas conchas. Aqui van unas bonitas fotos





Esta foto me encanta.



El desayuno en el hotel fue enorme, pero para la hora de comer japonesa, ya tenía hambre. Una de las mujeres de ayer estaba en el desayuno y le tocó atender mi mesa. Fue tan amable de explicarme cómo se comía lo que me había puesto. Aunque la pobre tenía mala cara esa mañana. Lo dificl de la comida japonesa es cómo comersela.
Después de desayunar hize el checkout. En ese momento, un señor que estaba antes que yo estaba comentandole al recepcionista las cosas que habían tomado en la habitación.Resulta que el té que me preparé en la habitación, antes de salir a dar mi paseo matutino, no era gratuito. Después dejé la mochila ahí y me fui a dar una vuelta a ver lo que me quedaba y hacer algunas compras.
Me compre un juego de palillos para toda mi familia. Compré también una estápula para servir arroz, típicas de Miyajima para mi padre. Y para mi sorpresa, encontré una tienda donde vendían ゆかた(yukata) por 2100円. Me pareció muy buen precio ya que había visto en otras tiendas y no bajaban de los 4000円. Las おび(Obi) salían 1050円. Por cierto, la isla también es famosa por las ostras. Se pueden comer ostras recién asadas cerca del templo de Itsukushima.



Mientras estaba de compras, me picaron un par de mosquitos. Que me piquen los mosquitos en Japón no es nada nuevo, ya que los días pasados ya me habían picado, pero los de esta isla son más como los mosquitos europeos, no se me hincha la picadura como me había pasado hasta entonces.
Después de hacer las compras me fui a Hiroshima. Ahí me compré un bono de tranvía por un día con la ayuda una amable japonesa. ¿Qué habría sido de mi sin los amables japoneses? Pues para empezar me fui a ver el castillo de Hiroshima. De camino al castillo me paré en una pequeña tienda a comprar agua y un paraguas. Cuando le conté a la señora de la tienda que me había dejado el paragua en el tren, en vez de venderme uno, me regaló uno que tenía usado. ¡Qué buena! El castillo es una replica del castillo que fue destruido por la bomba atómica. En este castillo tienen un traje de samuari y uno de dama de la corte que se puede probar la gente y sacarse fotos con sus propias cámaras. El único requisito es quitarse los zapatos antes de subirse al tatami. Una curiosidad de todos los sitios como museos, castillos, etc es que existen unos sellos con los que se pueden estampar en una hoja para llevarse la estampa de recuerdo. Otra curiosidad es que a los japoneses, tanto niños como adultos, se les reparten hojas para rellanar, para hacer la visita más didactica.
Este castillo cuenta la historia de la ciudad de Hiroshima y su castillo a lo largo de los siglos. Existe audio en inglés que lo cuenta. Una curiosidad de los castillos en Japón, al menos los que he visitado, es que tienen fotos de otros castillos famosos del país. Aunque el castillo no es original, merece la pena la visita para saber sobre la historia de la zona. Se pueden ver imágenes de cómo quedó el castillo después de la bomba atómica y de las fases de reconstrucción.



Luego fui al parque Shukkeien. Es un parque donde no abunda la gente por lo que se puede disfrutar a gusto, si se tiene tiempo. Es increible cómo ha salido adelante esta ciudad después de la bomba atómica, pero aun sigue en la memoria. Por ejemplo en esa imágen se ve un puente. Al lado del puede hay un cartel que cuenta que cuando estallo la bomba, mucha gente vino a refugiarse a este parque pero murieron antes de que les llegara la ayuda. Ese puente fue de lo poco que sobrevivió a la bomba atómica. De hecho existe un pequeño cartel, en japonés, que dice que no se puede subir por el puente, sino, que se pase por la pasarela que hay en la parte izquierda.



Tuve que darme prisa. Me fui directa a zona de los おこのみやき(Okonomiyaki). Me metí en el primero que vi y estaba buenísimo. Yo no suelo comer verduras, y menos col, pero me comí eso. Los おこのみやき(Okonomiyaki) llevan por lo menos media col grande cortada en tiras, entre otros ingregientes. Consite en un crepe, sobre él se pone la col y se asa sobre una plancha. Al lado se hacen el resto de los ingredientes, como son los fideos そば(soba), huevo ....Una vez hecho, se mezcla y se coloca sobre el crepe.Tengo que reconocer que no sabe nada a col.Menos mal que me pedí uno normalito y pequeño, porque son muy pesados. Te ponen el おこのみやき(Okonomiyaki) en una esquina de la plancha, en frente de ti y te dan una espátula de metal para partirlo y ponerlo en el plato. Lo siento, no me atreví a sacar una foto, pero vamos, que internet está lleno de fotos.
Aqui va una foto curiosa que saqué en un centro comercial subterraneo. No se si es que se vendían realmente paraguas o era alguna exposición. Recuerdo haber visto un cartel con precio.



Luego volví a la estación para coger el tren para volver a Kyoto. Después de tener el billete, intente llamar al hotel para avisarles sobre la hora que iba a llegar. Tuve que preguntarle a una señor que prefijo tenía que marcar para una llamada local. Cuando terminé de hablar con la señora del hotel, que calculó que llegaría sobre las 8:30pm, la señora que me ayudó con el prefijo estaba sorprendida por mi japonés. Me dijo que mi japonés era bueno. Bueno yo sé que せんせい(profesor) diría que me falta aún mucho para eso, y lo reconozco.
Me pasó lo que suele ser raro en Japón, mi tren llenó unos minutos tarde. Cuando llegué a Osaka, había perdido mi otro tren. Le comenté al revisor y me dijo que no importaba, que cogiera el proximo, pero que me sentara en el vagón de los asientos no reservados. Si, algunas veces, esto puede pasar, el mundo no es perfecto.
Cuando llegué a Kyoto intenté buscar la para de la guagua(autobus) que tenía que coger para ir al hotel y ya eran las 9pm. Encontré la guagua(autobus), pero resultó que donde estaba parada, sólo era para que se bajaran los pasajeros pero no para que se subieran. Entonces una chica que se acababa de bajar de la guagua(autobus) habló con el conductor y salió corriendo para llevarme a donde estaba mi parada. Estaba corriendo con una silla sin patas a cuestas. Fue tan amable y encima me dijo a que hora pasaría.
Llegué sobre las 9:30pm al hotel. Aunque les pedi disculpas, la señora parecía un poco enfadada. Debí haberles llamado cuando llegué a la estación de Kyoto. Pero, todo bien. La habitación es enorme y tiene vistas al monte. No hay edificios altos que tapen la vista.

Me tuve que levantar temprano para poder llegar temprano a Miyajima. Hasta ahora siempre me habían tocado los しんかんせん(tren bala) de tipo ひかり (Hikari) pero esta vez me tocó un こだま (Kodama) para ir desde Kyoto a Hiroshima. Tardó muchísimo en llegar, pero el viaje fue muy interesante.
Desde que he llegado, cada vez que me subo a un しんかんせん(tren bala) me da sueño automáticamente.En algunos de los momento es lo que abría los ojos, ví cosas maravillosas. Por ejemplo: una vez vi un río y las casas cercanas y los campos de arroz cubiertos por niebla y nubes muy bajas.Era precioso. También vi que el nivel de los ríos había subido muchísimo, tanto, que el agua cubría las 3/4 de los árboles cercanos al río. Resultó que ese fue el día que hubo un tifón, pero el tren viajaba lejos de la zona del tifón.
Algo curioso de los しんかんせん, es que cuando un のぞみ(Nozomi) pasa al lado de un ひかり(Hikari) o un こだま(Kodama), estos últimos, experimentan una fuerte sacudida.
Cuando llegué a Japón, pensaba que habrían más しんかんせん de tipo ひかり(Hikari) o un こだま(Kodama), pero resulta que es todo lo contrario, hay más のぞみ(Nozomi). Sinceramente los しんかんせん, en mi opinión, son mas cómodos, ya que no te dejan lejos del núcleo urbano aparte de que tienes la comodida de poder moverte y disfrutas de las vistas.
Cuando por fin llegué a Hiroshima, decidí irme directamente a Miyajima. Para ello hay que coger un tren local hasta una estación cerca del muelle desde donde hay que coger el ferry para ir Miyajima. No es dificil encontrar el ferry ya que existen carteles en inglés.
El viaje en ferry es fantástico, pero es un poco dificil que la gente te pueda sacar fotos ya que los pelos vuelan por todas partes. Aqui una una foto que tomé desde el ferry



Una vez que llegué a la isla, salí fuera a mirar a ver si había algún coche o guagua(autobus) del ryokan. Al no encontrarlo, volvía a entrar para llamarles para que vinieran a buscarme.Me dijeron que esperara donde estaba la parada de taxis. Cómo no sabía donde era, pues le pregunté a la señora que me atendió en la oficina turistica. Me equivoqué al conjugar el verbo llamar y lo dije en presente, asi que ella me entendió que tenía que llamar y se ofreció a llamar por mi. Asi que esperé por fuera hasta que vi llegar a un señor vestido estilo monje shaolin. Resulta que el uniforme masculino del ryokan es así.
El ryokan no estaba lejos.De hecho está justo dos calles encima del templo de Itsukushima. Cómo llegué temprano, pues dejé la mochila allí y salí a ver la isla. Por supuesto, la primera parada fue el templo de Itsukushima. Por cierto, al lado de la entrada hay una pequeña cuadra con la estatua de un caballo blanco. Y luego di una pequeña vuelta por los alrededores.



Aunque en la foto parezca que hay marea baja, no lo estaba del todo. Me di cuenta de eso al día siguiente por la mañana.



Antes de que se hiciera tarde, decidí subir a coger el teleférico para subir al monte Misen.Hay que subir bastante hasta llegar al teleférico y hay que caminar muchísmo más para llegar hasta la base de los templos. A medio camino hay que cambiarse de teleférico y hay que darse prisa ya que el último teleférico baja a las 5:00pm, sino hay que bajar caminando. Nada mas bajarse del teleférico se pueden ver un montón de monos. Tienen puesto un gran cartel que dice que no se lleve comida encima, que es mejor utilizar las taquillas para guardar las cosas para que los monos no molesten y también pone que es mejor no tocar a los ciervos ya que comen los excrementos de los monos.



Al volver abajo, cómo aun me quedaban un par de horas hasta la cena, pues mes puse a sacar fotos al lado del ryokan. El otoño ya se estaba empezando a asomar.Aqui van un par de fotos




Cuando empezó a llover y cómo todo había cerrado y todos los turistas ya se habían marchado, decidí irme al hotel.Por cierto, la isla se vuelve muy tranquila una vez que los turistas se han ido. No voy a poner fotos del ryokan, porque las fotos de su web son más bonitas y no quiero que la gente se lleve una decepción viendo fotos hechas con una cámara normalita. Lo digo porque me llevé una decepción cuando vi fotos del ryokan fuera de la página. Es un ryokan fantástico.
Pues cuando llegué tuve que esperar a que viniera una mujer que me tenía que acompañar hasta la habitación. Pobrecita, cuando vino le tocó cargar con mi mochila. Me ofrecía a ayudarla, ya que estaba llevando la mochila en el brazo y llevaba puesto un kimono pero me dijo que estaban bien. Una vez en la habitación me explicó que los zapatos debía dejarlos al lado de la puerta y me enseñó la habitación.
Me pusieron un dulce típico de Miyaima llamado もみじ(Momiji) con té. Me había comprado un par de ellos antes en una tienda antes de volver al ryokan, pero claro, los míos eran de sabores, té verde, té verde con leche y chocolate. El del ryokan era del sabor original. EL sabor a té verde con leche está buenísimo!



Pues sigo con el ryokan. Es mejor no cerrar con llave la habitación ya que las señoras van a estar yendo y viniendo durante la cena y durante la bienvenida. Un dato importante, cuando pedí la habitación con baño, supuse que el lavabo también estaría en la habitación, pues no, resulta que estába en el primer piso (y mi habitación en el 4º piso).Fue molesto tener que bajar en mitad de la noche.
Durante la bienvenida aparte del dulce te cuentan cosillas sobre el ryokan. Es muy interesante el nivel del formalismo. Las señoras se sentaban por fuera de la puerta de la sala y entraban sin levantarse y depuñes se daban la vuelta sentadas para cerrar la puerta. Una de las mujeres me explicó que el bolsito y la toalla pequeña era un regalo por parte del ryokan. Me explicó también cómo usar la caja fuerte, los sistemas de seguridad, la nevera, y donde estaban los utensilios para prepararme un té cuando me apeteciera.
Durante la tarde conocí a dos mujeres. Hize buenas migas con ellas, pareció sorprenderles y agradarles que pudiera hablar un poco de japonés. La mayor de las mujeres me preguntó cuantos años tenía, si estaba casada... La otra era más joven y las preguntas mas bien se las hacía yo a ella. A la más joven le pregunté dónde podía comer buen おこのみやき (okonomiyaki). Me dijo que ella era de Hiroshima y que para ella los mejores eran de Hiroshima y que debía probarlos allí ya que tanto los de Osaka como los de Tokyo saben muy diferentes. Fue tan amable, que durante la cena se quedo un ratito charlando conmigo y hasta me sacó fotos cuando se lo pedí. Para cenar, pedí さけ(sake) para beber. Aqui van fotos de la cena. Por cierto, me comentó la señora mayor que trae suerte beberse la semilla que hay al fondo de la botella de さけ(sake). La botella era pequeña, pero fui incapaz de bebermela entera. Eso si, al día siguiente no tuve nada de resaca.



El resto de las fotos de la cena las pondré en otra sección. Cómo fuera estaba lloviendo, decidí irme a dar un baño al onsen del ryokan. Allí, meti primero una pierna en el agua de la bañera de dentro, pero el agua estaba muy caliente, asi que decidí irme a la que estaba fuera, al aire libre( bueno teneía techo y una cortina de estera con plantas y al lado pasaba el río. Era precioso!
Me despido por hoy con estas fotos de la habitación



Amanecí temprano y fuera estaba lloviendo. Resulta que al final llovía mas fuerte de lo que pensaba y tuve que ir parandome por todas partes para no mojarme mucho.jejejeje Me vino de perlas el abanico que me regalaron en Yokohama para taparme la cabeza. Ya se que no tapa mucho, pero es mejor que nada.
Al final llegué hasta un museo y estuve esperando allí hasta que abrieran.En Nara no hace falta levantarse temprano para ir a ver los sitios. Al salir le pregunté a alguien del museo donde podía comprar un paraguas y resultó que en la tienda de souvenir del museo vendian paraguas transparentes por 350円 pero hay que pedirselo ya que no se ven a simple vista.Luego seguí viendo los templos hasta que fue hora de Naramachi para ver "Noh" que había visto en un cartel cerca del hotel el día anterior.



De camino me paré en una dulcería para probar mis primeros dulces desde que había llegado. Me pedí los dulces que salen en la foto. Le pregunté a la señora si me lo podía comer sentada en la tienda y me dijo que sí y me dejó un poco té y estuvo charlando un poquito conmigo. El dulce del plato era extremadamente dulce pero el otro estaba bien. Y lo redondo es una galleta de arroz.Antes de irme le pregunté a la señora dónde estaba el edificio al que quería ir.



Cuando llegué al edificio me di cuenta que la señora de la dulcería venía corriendo detrás de mi. Resultó que vino corriendo para devolverme algo que me había dejado olvidado en la tienda.¡Qué buena la señora!
Una vez subí al piso, los japoneses pensarón que me había invitado una señora hindú que estaba allí para traducir al inglés para los extranjeros, por lo que la llamarón. Ella fue muy buena y me explicó las bases del Noh y sobre el evento y me dejó la traducción que había hecho de la historia que se iba a representar.
La historia que se iba representar era sobre un hombre que comentió una falta ante su rey y fue desterrado a un bosque.El hombre estuvo viviendo arrepentido y hacía penitencia y un día consiguió la gota de agua en una hoja que le dió la vida eterna que le hizo vivir para siempre para poder servir a su rey para siempre. Perdón, han pasado muchos días y ya no recuerdo muy bien la historia.
También me explicó que era raro que un maestro tuviera una discípula, ya que en el Noh sólo pueden participar hombres.Me dijo que esperaban que viniera mucha gente, pero cómo el día se había puesto malo, pues al final no vino tanta gente como esperaban. Al principio explicaron las bases del Noh y el profesor dió una pequeña clase sobre la forma de caminar en el "Noh" a los niños y los asistentes que quisieran participar. Una chica japonesa que estaba allí y que hablaba muy bien el inglés me animó a participar con ella y sus amigos. Nos regalaron un abanico a todos los participantes.
Después vino una señora que tocaba la flauta y nos explicó las diferencias entre una flauta normal y la flauta que se usa en Noh. Es increible la amplia gama de sonidos que produce este tipo de flauta, desde los más agudos hasta los más graves. Después de una demostración con ambas flautas y una breve explicación, animaron a los asistentes a que probaran la flauta. La chica me animó otra vez para probarlo. Hay que soplar muy fuerte para poder sacarle algún sonido a esa flauta.Esta flauta es de las horizontales.
Luego la chica y sus amigos hicieron una pequeña obra de teatro con marionetas de papel en el que había dos narradores,uno en japonés y otra en inglés.La historia era sobre un un rey que mandaba a su lacayo a buscar el agua de la vida eterna.Este hombre fue hasta un río donde encontró al señor que la tenía. Este señor le decía al otro que se llevara la gota que había en una hoja, para darsela a su señor para que pudiera vivir para siempre.
Y luego, finalmente comenzó el Noh. El personaje principal lo interepretaba el maestro. La parte que representaba era los años de penitencia del personaje en el bosque hasta que al final encontró la gota de agua en una hoja que le dió la vida eterna. Aquí va una foto del maestro en plena actuación



Después de la actuación me pidieron que me quedara al intercambio de opiniones y me invitarón a comer "dango", un bizcocho que había traido una señora y a beber té. Me presentarón a un señor del grupo de Noh que hablaba español. Estuve hablando con él y los amigos de la chica.
Después de comer nos sacamos fotos. Me pusieron al lado del maestro.¡Qué honor! La verdad es que me sentía mal, ya que ese honor le pertenece a alguien de los presentes, pero no a mi.
La señora hindú me dejó su tarjeta y me comentó que llevaba un grupo de voluntarios que se ofrecía a intercambios culturales y me dijo que si necesitaba algo que la avisara.
Fue una experiencia fantástica y muy interesante.¡Qué suerte!. Nunca imaginé poder vivir algo así.




まさみ さん, siento mucho no haber podido explicarlo bien. Me gustaría que usted pudiera explicarle a todos sobre Noh.

Pues hoy me fuí desde Shiroko hasta Nara vía Nagoya y Kyoto. El viaje de Shiroko hasta la estación de Suzuka fue muy interesante. Dejadme que os cuente. Resulta que hay que coger el tren desde Shiroko hasta otra estación. De la otra estación hay que caminar hasta la estación de Suzuka para coger el Mie Express hasta Nagoya.
En la estación uno de los funcionarios de la estación me señaló en un mapa cómo llegar a la otra estación. Para variar, me perdí y di un rodeo para llegar. El problema de esta estación es que no tiene pinta de estación sino que hay una pequeña oficina abajo y después un par de pisos de escaleras hasta el andén por lo que es dificil reconocerla.
Le pregunté a una señora si esá era la estación y me dijo que si. Menuda casualidad que ella también iba a Nagoya desde esa estación. Subimos las dos hasta el andén y nos pusimos a hablar. Por suerte para mi, ella entendía mi japonés desordenado. Le intenté decir que mi estancia en Japón es cómo en una película, pero me expliqué mal y no me entendió. Me preguntó que películas japonesas había visto y le comenté sobre "きくじろ の なつ" (El verano de Kikujiro).Ahora que lo pienso, la verdad es que aquel sitio era como una escena de la película. En Japón la gente deja de hablar en los trenes, creo que es para no molestar a los demás. Hablamos un poco en el tren. Estuvimos hablando de su gato. Era una mujer muy simpática y nos reimos mucho.
Al llegar a Nagoya me dijo que me invitaba a comer a un resturante español. En el restaurante me comentó que esa era la primera vez que cogía ese tren para venir a Nagoya y la primera vez que iba a un restaurante español. Ninguna de las dos nos imaginabamos que nuestro día sería así. Para mi también fue la primera vez que almorzaba con una japonesa. Hay que ver la de vueltas que da la vida. Era una mujer encantadora y muy simpática.
Por cierto, ese restaurante español tenía ¡mojo! (es una salsa de las Islas Canarias). Me sorprendió muchisimo ver una cartel de carne con mojo. Otra curiosidad del restaurante eran los mejillones. Jamás en mi vida había visto mejillones sin concha, pero resulta que en Japón se venden los mejillones sin concha. Otra cosa fue que vi a uno de los cocineros poner ajo en una cazuela con aceite. Yo pensaba que iba a hacer gambas al ajillo, pero resultó que el cocinero en vez de gambas puso mejillones. ¿Alguien ha probado los mejillones al ajillo?
Luego ella me acompañó hasta la estación y nos despedimos. Espero que algún día se anime a escribirme o que se anime a hacerme una visita.
Luego me fui de Nagoya a Kyoto en しんかんせん(tren bala) y en tren local desde Kyoto a Nara. A la salida de la estación pedí un mapa en la oficina de turismo. No se porqué me dan un mapa en español, lo prefiero en inglés, que si me pierdo los japoneses pueden leer inglés y ayudarme.
Pues resulta que el camino al hotel es una subida de 15 minutos. Fue terrible, con calor y sin ninguna sombra donde cobijarse. Para colmo el mapa que proporciona el hotel está mal. Después de perderme y de preguntarle a un par de personas, una mujer fue muy amable y me acompañó hasta la puerta del hotel. Antes de irse me dijo que a las siete fuera al parque que había un evento.
La entrada del hotel está llena de cosas, pero la habitación era bastante espaciosa y tenía mi propio baño y lavabo.En este hotel hay que ponerse el futón por la noche y quitarlo por la mañana y la entrada cierra a las 10pm, asi que hay que volver temprano. Cuando llegué a la habitación estaba cansadísima y con la ropa empapada de sudor. La verdad es que no me apetecía salir, pero como aun era temprano pues decidí salir, además, tenía que ir al parque para ver el evento que me había comentado la señora.
Pues siguiendo en línea recta desde le hotel se llega al parque de Nara. Ahí había cómo una especie de feria. Tenían montados tenderetes de comida y producto alimenticios y helados para vender y con bancos en frente para que la gente pudiera sentarse a comer tranquilamente. Pues ahí habían un montón de ciervos. Estos ciervos están muy acostumbrados a la gente. También se podía comprar una especie de galletas para dar de comer a los ciervos.
Luego seguí paseando por el parque hasta llegar a una calle delante de la entrada del templo. Allí habían un montón de puestos de comida. Esa tarde en el templo Todaiji había un evento en el que se podía ver una obra "Noh", una ópera china y un obra de Azerbajan. La entrada era gratuita asi que entré a ver. Tuve la suerte de ver la ventana a la altura de los ojos de la estatua del gran Budha del templo abierta. Al día siguiente me enteré que raras veces se abre dicha ventana.
Cuando salí del templo, llevana un folleto que me había dejado en la mano y llegó un ciervo y me lo quitó y emepezó a comerselo. Intenté quitarselo, pero no puede. Otro chico también lo intentó pero tampoco lo consigió. Al final llegó una chica y se lo quitó con mucha facilidad y lo tiró. Hay que tener cuidado con lo que se lleva encima que los ciervos te lo pueden quitar. Después me compré esto para comer en uno de los puestos:



Luego volví al parque y descubrí que habían miles de velas por todas partes. Las fotos no les hacen justicia. Era precioso, todo estaba ocuro y sólo se veían las velas, bueno y también, las luces de las cámaras.



Este ha sido mi primer festival de verano en Japón, por tanto, he podido hacer todas esas cosas que suelen enseñar en los anime que se pueden hacer en un festival de verano.Por ejemplo: coger peces pequeñitos con una pequeña red y comer un montón de cosas diferentes. Aqui os dejo una foto de mis peces.Por supuesto no me los quedé, se los devolví a la mujer, pero fue muy divertido!



Aqui va una foto de mi cena de esa noche. A que tiene buena pinta!


Muchos me habeis comentado que os preocupasteis cuando dejé de escribir en el blog. Lo siento! Ya sé que estabais todos esperando que siguiera escribiendo. Os pido disculpas a todos. Siempre llegaba muy cansada. Pero no os preocupeis, que ahora que he vuelto a casa continuaré escribiendo sobre mis aventuras en el país nipon.Muchísimas gracias por preocuparos.

Aprovecho para comentar unas cosillas.

La primera es que no existen palabras para describir la hospitalidad y amabilidad de los japoneses. Me sabe mal que en cualquier otra parte del mundo ellos no son tratados tan bien como nos tratan ellos. Por favor, cuando vean un japonés cuidenlo como hacen ellos con nosotros.

La segunda es comentar que los españoles tenemos la fea costumbre de levantar la voz cuando no nos entienden. Por favor, los japoneses son gente muy buena y paciente y no es que estén sordos, es que no nos entienden por la dificultad del idioma. Por favor, sean pacientes y no levanten la voz.

Para finalizar quiero decir que en mi vida me habían pasado tantas cosas tan interesantes y tampoco conocido tanta gente tan diferente e interesante. Adoro Japón!

みんな さん, ありがとう ございました!